En los últimos 4 años el MIDAGRI ha puesto a disposición 9 variedades de legumbres con alta calidad genética
Nota de prensaSe ha logrado mejorar, en un 60%, el rendimiento productivo de las hectáreas.
12 de febrero de 2024 - 2:11 p. m.
(Lima, 12 de febrero 2024).- Las nueve variedades de cultivos entre quinua, trigo, frijol, haba, kiwicha y tarwi con alta calidad genética que ha liberado en los últimos 4 años el Ministerio de Desarrollo y Riego (MIDAGRI), mediante el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA), vienen incrementando en más de un 60% el rendimiento de la hectáreas en las regiones de Junín, Apurímac, Cusco, Ayacucho, Huancavelica, Pasco y Puno.
Así los informó el jefe nacional del INIA, Jorge Ganoza Roncal, quien remarcó que estas variedades con alto valor son el resultado de un trabajo de investigación y de mejoramiento genético el cual busca mejorar la capacidad económica del productor y garantizar la seguridad alimentaria.
Estas variedades, desarrolladas por el INIA mediante sus Estaciones Experimentales Agrarias en todo el país, tienen la capacidad de tolerar las principales plagas que afectan a los cultivos, ofrecen un buen rendimiento en campo, se adaptan a diferentes tipos de clima y ofrecen frutos con alta competitividad para los mercados.
En quinua el INIA ha liberado las variedades de Atipaq, Señor del Huerto y Acollina, las cuales tienen la característica de generar un rendimiento entre 3 y 4 toneladas por hectárea, brindan granos con buena textura y altos contenido de vitaminas y antioxidantes ideales para combatir la anemia y tipos de cáncer.
En trigo las variedades liberadas son la Kanchareq y Antapamino, ambas -por su alto valor genético- ofrecen un rendimiento entre 5 a 8 toneladas por hectárea, ofrecen granos de 3.6 mm de ancho y 6.4 mm de longitud, posee 10 % de gluten, 7.5 % de proteínas y 5 % de fibra cruda, convirtiéndolo en ideal para agroindustria y la producción panificadora.
En tarwi se tiene la variedad Mascanchino que destaca por superar la 1.5 toneladas por hectárea, posen un alto valor genético con 46.3 % de proteínas y 7.3 % de fibra; además es tolerante a las principales plagas como la roya amarilla, Uromyces Lupinicolus, Fusarium sp y anthracnosis sp.
Y finalmente, el INIA-MIDAGRI ha liberado la variedad de haba Siwina. Tiene un rendimiento de 3.16 toneladas por hectárea, sus granos tienen 23 % de proteínas, ofrece cualidades alimenticias y nutricionales; tiene un gran aporte en la dieta del poblador andino y urbano.
El empleo de estas variedades ha permitido que el productor fortalezca la capacidad productiva del suelo agrario, incremente en un 60% su rentabilidad económica y logre mayor presencia competitiva en los diferentes mercados nacionales internacionales. “Buscamos generar una agricultura sostenible y accesible al productor”, estimó Ganoza Roncal.