Poderosa tormenta geomagnética azota a la Tierra

Nota de prensa
ABC News de Australia

Fotos: ABC News de Australia

Mario Zegarra-Valles

11 de mayo de 2024 - 9:55 a. m.

La noche del 10 de mayo la Tierra experimentó una de las tormentas geomagnéticas más grandes ocurridas desde el año 2003. Llegó a ser de categoría G5 (extrema), lo que implica una serie de probables riesgos, que se resumen a continuación:

- En los sistemas de energía: Puede haber problemas generalizados en el control de voltaje y problemas en los sistemas de protección. Algunas redes pueden experimentar un colapso total o apagones. Los transformadores pueden sufrir daños.

- En la operación de las naves espaciales: Extensas superficies de ellas pueden cargarse eléctricamente; problemas de orientación, de enlace a Tierra y en el seguimiento a los satélites.

- En otros sistemas: Las corrientes eléctricas inducidas en tuberías (gas, petróleo, etc.) pueden alcanzar los cientos de amperios; puede ser imposible la propagación de ondas de radio HF (alta frecuencia) en muchas áreas durante uno o dos días; la navegación por satélite puede degradarse durante días; la navegación por radio de baja frecuencia puede quedar fuera de servicio durante horas; y se ha visto auroras a latitudes tan bajas como Florida y el sur de Texas (típicamente a 40° de latitud geomagnética).

En efecto, los reportes de auroras australes y boreales no han dejado de inundar las redes sociales. Testigos en Ushuaia, el sur de Chile, Australia, Orlando, Texas, Suiza, Inglaterra y otros lugares han sido deslumbrados por el energético ingreso de innumerables partículas cargadas eléctricamente provenientes de Sol, eyectadas hacia el espacio por la región activa AR 3664, la misma que antes comentábamos que podía apreciarse a simple vista. El campo magnético de nuestro planeta redirigió estas partículas hacia el entorno de las zonas magnéticas polares y en su interacción con nuestra atmósfera, a gran altura, produjeron un espectáculo memorable de luz serpenteante.