Historias que nos unen: Elsa Huamán, El ángel de Pajonal Alto

Nota de prensa
Esta semana fue condecorada por el Ministerio de la Mujer
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2 de diciembre de 2023 - 8:00 a. m.

El color cobrizo de su rostro denota sus largas caminatas bajo el intenso sol de Ica. Con cuadernos y medicinas en mano Elsa Huamán Pantigoso, de 73 años, atraviesa largas distancias para socorrer a las personas más necesitadas de la ranchería Pajonal Alto, distrito de Vista Alegre, Nazca.
 
A los 12 años probablemente perdió la oportunidad de hacer de la enfermería su profesión ya que ganó un concurso escolar para estudiar primeros auxilios en Lima, pero por temor a los peligros de la ciudad, su padre no la dejó viajar. Así, Elsita sentó raíces en el lugar donde nació. A los 16 años se enamoró y luego trajo al mundo tres hijos producto de su matrimonio.
 
Como se dedicaban a la agricultura y una sequía prolongada azotó la ranchería, Elsa y su familia debieron buscar nuevas alternativas en Lima para el sustento económico; sin embargo, como uno de sus niños enfermó, tuvo que regresar a Pajonal Alto, y al poco tiempo, enviudó quedándose a cargo de sus hijos, aun pequeños.
 
Entonces, el trabajo en el campo fue la mejor opción; para vender zapallos y culantro caminaba día a día un sendero polvoroso y bajo el inclemente calor, más de una hora hasta llegar a la carretera.
 
Poco a poco, fue compenetrándose con las dificultades más urgentes de su comunidad como la falta de una posta médica y por eso, cuando sus hijos crecieron, Elsa aun con su vibrante vocación de servicio, fue a capacitarse al hospital de Nazca para aprender primeros auxilios y así aprendió a colocar inyecciones y atender quemaduras y partos. 
 
Dicen que los que menos tienen son los que más dan, frase que calza muy bien con Elsa quien velaba por la salud de sus pacientes inclusive visitándolos para asegurarse que seguían sus tratamientos; también llevaba a su casa a personas con enfermedades terminales; de esta forma, ha logrado salvar varias vidas. Y cuando era necesario, trasladaba a los heridos más graves hasta el centro de salud cargados en su burro. 
 
También, se capacitó para alfabetizar a personas adultas mayores, enseñándoles a escribir sus nombres y a firmar para que cobren la subvención económica que les otorga el Estado, a través de Pensión 65.
 
Elsa Huamán, quien desde el 2017 es usuaria de Pensión 65, atiende el botiquín comunitario, es catequista, promotora de salud, conciliadora y maestra de adultos mayores. Además, gestiona con instituciones públicas y privadas mejoras para los pobladores de Pajonal Alto. Pese a sus múltiples ocupaciones dice que “aún hay mucho por hacer”.

Lima, 2 de diciembre de 2023
Unidad de Comunicación e Imagen
Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65

Esta noticia pertenece al compendio Historias Que Nos Unen